La cuarta revolución industrial da lugar a la monetización de datos con la presencia de las últimas tendencias tecnológicas que han surgido en las últimas décadas. Al tener presente la importancia de los datos y su cadena de valor, se puede aprovechar el potencial de éste al punto de obtener un beneficio económico.
Es fundamental entender que al hacer un buen uso de la data, no se está enfrentando un reto tecnológico, sino un reto de negocios. ¿Por qué? Porque las herramientas y las soluciones ya existen. El problema no es cómo recopilar y procesar esos grandes volúmenes de datos, pues para ello hay una amplia gama de herramientas que buscan solucionar dicha problemática. El meollo del asunto radica en cómo éstos se van a aplicar a las estrategias transversales de la empresa y cómo se van a generar ganancias a partir de ellos.
En este orden de ideas, los cinco factores clave para una gestión óptima del activo más importante de su empresa son:
- Almacenamiento según el tamaño de su empresas
Con el paso del tiempo se comprueba cada vez más que es fundamental contar con una infraestructura de almacenamiento que permite recopilar el activo más preciado de su compañía. Ésto, sin duda alguna, le contribuirá al posicionamiento de la empresa en el mercado.
¿Por qué? Por ejemplo, con el incremento del uso de dispositivos a la red de sus clientes, será menester encontrar más capacidad para almacenar dicha información cuya utilidad puede significar mayores ventas para su empresa. De lo contrario, al no tener la posibilidad de integrar y procesar en conjunto estos volúmenes de información, se podrían estar perdiendo oportunidades para la estructuración de ventajas competitivas que permitan anticiparse a las necesidades del mercado.
Dependiendo del tamaño de su organización, diferentes plataformas ofrecen paquetes pensados en las obligaciones puntuales de los negocios, por ello hay que tener presente las siguientes variables:
- Segmentación de la información por:
- Jerarquización
- Frecuencia de uso
- Criticidad y confidencialidad de la información
- Tamaño del volumen de datos
- Crecimiento de la empresa
- Según número de colaboradores
- Según espacio de trabajo y líneas de negocio
Cada industria avanza a un ritmo diferente, por lo que hay que analizar cuál sería la opción más viable para expandir la infraestructura de storage.
Cuando existe esta combinación de servicios, tanto en físico como en la nube, los datos se pueden administrar desde una sola plataforma, pues con la variedad de opciones, muchos negocios han encontrado que su información se encuentra repartida en tipos de almacenamiento heterogéneos.
2. Accesibilidad de los datos
La accesibilidad es un factor clave a la hora de determinar un tipo de almacenamiento, por ello la información se debe clasificar en función de su tamaño y frecuencia de acceso. Por ejemplo, se debe asegurar de que los archivos a los que se accede regularmente estén fácilmente disponibles en cualquier momento. La evaluación de esta información permite segmentar los datos que se deben almacenar en servidores físicos (on-premise) y los que se pueden almacenar en servidores virtuales (en la nube).
3. Latencia
Al momento de gestionar volúmenes de datos corporativos robustos, es necesario diseñar y construir una infraestructura de almacenaje aprovisionando una capacidad de ancho de banda y potencia de procesamiento apropiado. Lo anterior, es vital porque una baja latencia permite cumplir con la obtención de resultados para una buena toma de decisiones en tiempos reducidos.
Las empresas dependen cada vez más de herramientas de colaboración para trabajar con colegas sobre documentos compartidos en tiempo real. Los administradores de tecnología de la información saben que sin la latencia y la potencia de procesamiento adecuados, las herramientas de colaboración pueden causar más inconvenientes que beneficios.
4. Cumplimiento normativo
En ciertos países las normativas sobre el manejo y protección de datos son estrictas especialmente en sectores como salud o finanzas. Para ello, los responsables de tecnología de la información prestan atención a cumplir con dichos requerimientos. Como solución a esta situación, están los servidores físicos (on-premise) que permiten mantener la información almacenada de manera totalmente segura.
5. Escalabilidad
Las empresas muchas veces no son conscientes de las necesidades de espacio que van a tener. La escalabilidad es un aspecto que tiene que ver con el largo plazo. Se refiere a cuánta capacidad tiene la herramienta para incrementar, según se requiere, la capacidad de almacenaje porque, de lo contrario, obligaría a cambiar de herramienta con el tiempo al no disponer de recursos suficientes en espacio de almacenamiento para abastecerse, lo que se traduciría en mayores costos para la empresa.
Muchas empresas no han tenido esto en cuenta y se encuentran con que tienen que borrar antiguas copias de respaldo, o necesitan poner orden en los archivos almacenados de su empresa.
Para cerrar, cabe resaltar lo preponderante que es implementar un diseño estratégico para que la gestión de infraestructura tecnológica responda a los requerimientos del negocio. Un sistema de almacenamiento de datos formal es el primer paso para lograr la monetización de la información.
De esta manera, obtendrá:
- Mejor conocimiento de sus clientes
- Consolidación de la marca de su empresa en el mercado
- Mejor tiempo de respuesta
- Procesos con un alto nivel de eficiencia
- Más tiempo para que sus colaboradores se desempeñen en la creación de nuevos proyectos.